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Rufus

Rufus es un gatito de colonia que rescatamos debido a su mal estado. Sucio, en los huesos y lleno de heridas, no podía seguir en la calle. Antes de pasar por el veterinario, tuvo que estar unas semanas en una acogida de emergencia para recuperarse lo suficiente como para poder llevar a cabo cualquier tipo de tratamiento.

Cuando ya se había recuperado un poco lo pudimos esterilizar, desparasitar y le tuvieron que quitar varios dientes debido a lo mal que tenía la boca. También lo testaron, y desafortunadamente, dio positivo en inmunodeficiencia.

Sin poder comer bien, todavía muy débil, y con el diagnóstico de inmuno, no podía volver a la calle. Rufus ha tenido que volver a la acogida de emergencia, pero aquí no le podemos dar toda la atención que requiere y sigue teniendo mucho miedo. Apenas sale de su cueva y come muy poquito. Para recuperarse del todo necesita una mano amiga que le ayude a aprender a confiar en el humano, para que poco a poco se vaya encontrando más a gusto y feliz.

Si puedes ayudar a Rufus y darle una nueva oportunidad después de toda una vida de sufrimiento, ponte en contacto con nosotros para venir a conocerlo. .

Kitty

LKitty es una gatita que conocemos desde hace tiempo en su colonia de Montflorit y hacía tiempo que la veíamos muy gorda y sospechábamos que estaba preñada. Esta zona es un pozo sin fondo de gatos enfermos, malnutridos, camadas indeseadas y nacimientos sin control. No podemos ayudarlos a todos, pero con Kitty tuvimos suerte de que en ese momento teníamos una acogida libre. La pudimos capturar para que diera a luz bajo techo y sin peligros. Al cabo de un par de semanas, Kitty tuvo 3 cachorros, 2 machos y 1 hembra.

Sus pequeños han ido creciendo sanos y felices, confían en el humano y son muy sociables y juguetones. Los tres han conseguido una adopción y al cumplir los 2 meses se han ido con sus nuevas familias. Ahora Kitty se ha quedado sola y esperamos que esto ayude en su socialización, pues de momento sigue con mucho miedo al humano y no acepta el contacto. Los voluntarios seguirán trabajando con ella, pero lo ideal sería encontrar una casa de acogida donde se pudieran dedicar en exclusiva a ella para que poco a poco vaya aprendiendo a calmarse y aceptar las caricias, para que, con el tiempo, sea una gatita tranquila, cariñosa y feliz..

Jack

Jack es un gato adulto que rescatamos de una de nuestras colonias. Cuando llegó estaba todo calvo, lleno de heridas y costras de rascarse por las pulgas. Además, tenía el ojo infectado y se le tuvo que quitar. Se le esterilizó y testó, y dio positivo en inmuno. El pobre estaba tan mal que no podía volver a la colonia, no habría sobrevivido, así que se quedó con nosotros.

Cuando estaba en la colonia era un gato bastante cariñoso, se dejaba acariciar y se restregaba por las piernas, pero en la acogida se mostró más reservado y tímido. Para que se fuera soltando, le pusimos con otro gato positivo Rufus, para que al menos no se sintiera solo. Fue una buena idea, porque los dos han hecho muy buenas migas y Rufus le ayuda a Jack a sentirse más seguro y tranquilo. Poco a poco va bajando sus defensas y se va adaptando a los humanos y a estar en una casa, donde también convive con perros sin problema.

Jack es un gato muy tranquilo y bueno, pero que necesita una familia con paciencia y que le de mucho cariño. Aunque es positivo en inmuno, puede vivir muchos años sin problema, y ahora que tiene comida y agua todos los días se ha puesto hasta gordito y el pelo lo tiene limpio y brillante. Estamos seguros de que en la calle no habría sobrevivido, así que si tarda un poco más en ser sociable no importa. Lo importante es que ahora está seguro y fuera de peligro..

Bruno

LBruno es un gatete que llegó llenos de heridas, muy delgado, enfermo y asustado. En el tiempo que lleva con nosotros hemos podido curar sus heridas externas y un poco también las internas. Hemos descubierto que es un comilón y se deja hacer de todo si hay una latita o una chuche por medio. Poco a poco nos estamos ganando su confianza y va saliendo cada vez más de su escondite y aceptando el contacto humano.

Aparte de llegar desnutrido, a los pocos días le diagnosticaron un carcinoma en el interior de la nariz. Se lo pudimos tratar, pero al estar en un lugar de difícil acceso, es difícil llevar un control. Le hemos tratado también otro carcinoma en el morrito, y va evolucionando muy bien.

Pero es un gato adulto, con una enfermedad de la que no tenemos un pronóstico claro y un poco gruñón al principio, por lo que lo tiene muy difícil para encontrar una acogida o adopción. Sin embargo no perdemos la esperanza, porque estamos seguros de que alguien se enamorará de Bruno tanto como nosotros.

Viena

Viena ya es una habitual de Adac. Rescatamos a esta gatita hace un par de meses. Su hermana había sido rescatada un par de meses antes, y acababa de morir de pif. Así que cuando Viena empezó a mostrarse apática y dejó de comer, nos saltaron todas las alarmas.

La llevamos inmediatamente al veterinario, donde le hicieron varias analíticas y recomendaron hacer más pruebas. Mientras esperábamos a la cita para la ecografía descubrimos que había una marca en especial de sobres que sí comía, por lo que se ha estado alimentando casi exclusivamente con estos sobres. No come pienso ni casi ninguna otra marca.

Cuando la llevamos a la ecografía, su estado había mejorado, sin duda debido a que había vuelto a comer, pero aún así sus órganos se veían mal y había sospechas de cáncer. Nos derivaron a un especialista oncológico en Barcelona, donde le han hecho más pruebas y han descartado el cáncer. Teniendo en cuenta todas las pruebas, parece que sufrió una pancreatitis y una peritonitis, de las que ya se ha recuperado, pero de vuelta en nuestro veterinario le volvieron a hacer una radiografía, donde observaron una inflamación en los pulmones. Le diagnosticaron bronquitis y bronquiolitis, y ya está en tratamiento. En los próximos días habrá que ir viendo su evolución y controlando que vaya mejorando.

Afortunadamente, Viena es una gata buenísima que se deja manipular, por lo que, aunque la pobre se pasa la vida yendo y viniendo al veterinario, nunca ha puesto mala cara ni ha hecho amago de arañar o morder, a pesar del estrés. Esperamos que con el nuevo tratamiento empiece a sentirse mejor y también coma más y coja fuerzas. Todo ayudará a que se recupere totalmente. Lo ideal sería encontrarle un hogar definitivo, donde ella se pueda relajar y centrarse en su recuperación. Ojalá no tarde en encontrar una familia, ya que es una gata buenísima y preciosa que se merece una jubilación dorada..

Dalila

Dalila es una gatita que viene de una de nuestras colonias más peligrosas. Es una colonia que ha estado desatendida durante años. Lo que comenzó como un par de gatos en unos huertos, en pocos años se transformo en una colonia improvisada donde nadie cuidaba de un número enorme de gatos. Cuando llegamos nosotros nos encontramos con unos 20-30 gatos desnutridos, enfermos, con infecciones y sin ningún control de natalidad.

Poco a poco hemos ido mejorando sus condiciones, con alimentadores que van cada día a poner agua y comida, que controlan el estado en el que están los gatos y que han ido haciendo capturas para esterilizar y soltar, y también para dar cuidados veterinarios.

Una de las que se encontraba peor era Dalila. Tenía el ojo infectado y estaba muy delgada y con heridas por todo el cuerpo. Le operaron el ojo y le llevamos a una acogida, pero no fue bien y tuvimos que cambiarla. Además, vimos que el ojo no se le estaba curando como debía, por lo que necesitó otra operación. Con el estrés de tanto cambio, le salió un eccema en la cara, por lo que tuvo que llevar campana durante varias semanas, ya que si se la quitábamos se rascaba el ojo y el eccema, dejándose la cara en sangre viva. Afortunadamente, Dalila es una gata muy dócil y buena, por lo que se deja hacer curas y la podemos llevar al veterinario sin mucho drama.

Ahora está en una acogida más tranquila, donde poco a poco se va adaptando. Ya sale de su habitación, se mueve por la casa, se limpia, come bien y cada día está mejor y más recuperada. Ahora solo falta que encuentre un hogar y una familia que le haga un hueco en su corazón..

Huesitos

A Huesitos la conocimos con apenas 3-4 meses, cuando la alimentadora de su colonia nos avisó de que había un peque que tenía media patita delantera cortada y con el hueso fuera, de ahí su nombre ;-). Después de varios intentos por fin conseguimos atraparla. Cuando la llevamos al veterinario ya nos dijeron que si hubiéramos tardado un poco más, no habría sobrevivido, pues tenía ya la herida gangrenada y se le tuvo que amputar la patita casi por completo. Además, debido a la herida, ella no podía saltar ni correr, tenía miedo de los demás gatos y siempre comía la última porque no le permitían acercarse. Entre la herida y la falta de alimento, Huesitos tenía los días contados en esa colonia.
Después de la operación la llevamos a una casa de acogida, y tuvo que volver varias veces al veterinario para revisiones y curas. Físicamente está totalmente recuperada y está muy sana, pero su socialización está siendo más complicada. La mayor parte de sus interacciones con humanos han sido para capturarla, llevarla al veterinario y hacerle las curas, por lo que sigue teniendo mucho miedo y no permite que se le toque ni que nos acerquemos mucho.
Ahora está en una acogida nueva donde le pueden dedicar más tiempo y va avanzando de una manera muy positiva. Aunque ya no es un cachorro y lo tendrá más complicado para encontrar una adopción, esperamos que aparezca una persona a la que no le importe que ya no sea un bebé y que se enamore de ella tanto como nosotros.

Christie

Christie es una de nuestras gatitas del grupo de los «invisibles». Ya no son peques, les paraliza el miedo, no han sido socializados a tiempo y el ser humano les aterroriza. Pero con tiempo y paciencia, la gata Christie tiene todas las papeletas para ser muy cariñosa y tranquila.

La rescatamos el año pasado cuando tenía unos 6 meses de una colonia donde corría peligro, por lo que no quisimos que volviera una vez esterilizada. Le buscamos una casa de acogida, pero la otra gata de la acogida y ella no se llevaban bien, por lo que Christie se pasaba el día escondida y sólo salía a comer por la noche.

En su nueva acogida está con más gatos, y se llevan bien, pero no tiene la atención individualizada que requiere. Christie necesita una casa donde se le pueda dar una atención más personalizada, con gatos extremadamente sociables, y con humanos con mucha paciencia que valoren cada pequeño gesto de acercamiento y le permitan ir perdiendo el miedo poco a poco.

Aunque ahora no esté en la colonia y su vida no corra peligro, nos da mucha pena verla sufrir por el miedo que no es capaz de superar. Ojalá pronto aparezca alguien que le de la oportunidad de una vida tranquila y libre de estrés, llena del amor y cariño que tanto se merece.

Draculín

Draculín es un gato jovencito, pero en su corta vida ya ha pasado por muchas aventuras. Nos llegó el aviso de una chica porque había visto en el polígono donde trabajaba a un gato que apenas podía caminar por un bulto en la pierna trasera. Le consiguió coger y lo llevamos al veterinario. Allí vimos que el bulto era un tumor enorme casi tan grande como su cabeza. Después de una operación muy complicada, se le consiguió extirpar el tumor y hacer un injerto de piel en la herida. Desafortunadamente, también descubrimos que era positivo en inmuno. Con un post-operatorio tan complicado, y además siendo inmuno, era imposible que pudiera volver a la calle.

Tuvimos suerte y le encontramos una casa de acogida con más gatos y con un cuidador muy atento, que le hacía sus curas diarias sin tener jamás ni una sola protesta por parte de Draculín. Hemos descubierto que es un gato muy cariñoso, le encanta estar con personas y que le hagan mimos sin parar.

La herida ha evolucionado fenomenal, ya le está saliendo pelo nuevo y su patita vuelve a estar perfectamente operativa. Sin embargo, parece que nos ha salido también un poco dramas este gato, porque llora por las noches si está solo y no le gusta la competencia, marcando las zonas donde se echan a dormir sus hermanos de acogida.

Así que ahora le estamos buscando otro hogar, a ser posible definitivo, donde él sea el rey de la casa y nadie le robe el protagonismo. Es un gato ideal para personas tranquilas y hogareñas, ya que él solo quiere acurrucarse a tu lado y que no pares de acariciarle.

Garfito

Garfito es el hermanito de Vespa y los capturamos el mismo día. Los dos entraron en la jaula sin poner muchos problemas, y la idea era esterilizar y volver a soltar en su colonia. Pero cuando volvimos para hacer la suelta, nos encontramos con varios gatos muertos, aparentemente envenenados. Ante este panorama, no quisimos volver a dejarlos allí, donde corrían tanto peligro.

Esta decisión conllevó encontrarles una casa de acogida adecuada para unos gatitos que ya no eran cachorros y que estaban sin socializar y con un gran miedo a los humanos.

Con Garfito tuvimos mucha suerte y encontramos una casa de acogida con experiencia en gatos asustados y agresivos, y con más gatos en la casa, la situación ideal para él. Con mucha paciencia y dedicación, Garfito poco a poco se va soltando, haciendo nuevos amigos y confiando por primera vez en los humanos.