Viena ya es una habitual de Adac. Rescatamos a esta gatita hace un par de meses. Su hermana había sido rescatada un par de meses antes, y acababa de morir de pif. Así que cuando Viena empezó a mostrarse apática y dejó de comer, nos saltaron todas las alarmas.
La llevamos inmediatamente al veterinario, donde le hicieron varias analíticas y recomendaron hacer más pruebas. Mientras esperábamos a la cita para la ecografía descubrimos que había una marca en especial de sobres que sí comía, por lo que se ha estado alimentando casi exclusivamente con estos sobres. No come pienso ni casi ninguna otra marca.
Cuando la llevamos a la ecografía, su estado había mejorado, sin duda debido a que había vuelto a comer, pero aún así sus órganos se veían mal y había sospechas de cáncer. Nos derivaron a un especialista oncológico en Barcelona, donde le han hecho más pruebas y han descartado el cáncer. Teniendo en cuenta todas las pruebas, parece que sufrió una pancreatitis y una peritonitis, de las que ya se ha recuperado, pero de vuelta en nuestro veterinario le volvieron a hacer una radiografía, donde observaron una inflamación en los pulmones. Le diagnosticaron bronquitis y bronquiolitis, y ya está en tratamiento. En los próximos días habrá que ir viendo su evolución y controlando que vaya mejorando.
Afortunadamente, Viena es una gata buenísima que se deja manipular, por lo que, aunque la pobre se pasa la vida yendo y viniendo al veterinario, nunca ha puesto mala cara ni ha hecho amago de arañar o morder, a pesar del estrés. Esperamos que con el nuevo tratamiento empiece a sentirse mejor y también coma más y coja fuerzas. Todo ayudará a que se recupere totalmente. Lo ideal sería encontrarle un hogar definitivo, donde ella se pueda relajar y centrarse en su recuperación. Ojalá no tarde en encontrar una familia, ya que es una gata buenísima y preciosa que se merece una jubilación dorada..