Dalila es una gatita que viene de una de nuestras colonias más peligrosas. Es una colonia que ha estado desatendida durante años. Lo que comenzó como un par de gatos en unos huertos, en pocos años se transformo en una colonia improvisada donde nadie cuidaba de un número enorme de gatos. Cuando llegamos nosotros nos encontramos con unos 20-30 gatos desnutridos, enfermos, con infecciones y sin ningún control de natalidad.
Poco a poco hemos ido mejorando sus condiciones, con alimentadores que van cada día a poner agua y comida, que controlan el estado en el que están los gatos y que han ido haciendo capturas para esterilizar y soltar, y también para dar cuidados veterinarios.
Una de las que se encontraba peor era Dalila. Tenía el ojo infectado y estaba muy delgada y con heridas por todo el cuerpo. Le operaron el ojo y le llevamos a una acogida, pero no fue bien y tuvimos que cambiarla. Además, vimos que el ojo no se le estaba curando como debía, por lo que necesitó otra operación. Con el estrés de tanto cambio, le salió un eccema en la cara, por lo que tuvo que llevar campana durante varias semanas, ya que si se la quitábamos se rascaba el ojo y el eccema, dejándose la cara en sangre viva. Afortunadamente, Dalila es una gata muy dócil y buena, por lo que se deja hacer curas y la podemos llevar al veterinario sin mucho drama.
Ahora está en una acogida más tranquila, donde poco a poco se va adaptando. Ya sale de su habitación, se mueve por la casa, se limpia, come bien y cada día está mejor y más recuperada. Ahora solo falta que encuentre un hogar y una familia que le haga un hueco en su corazón..